martes, enero 17, 2006

Buddha me come














pero pido por favor a las luciérnagas que me dejen dormir porque de otro modo mañana es ahora mismo y por las cortinas de mi casa se me viene el mundo encima cargado de murciélagos y panorámicas al otro lado de mis ojos tendremos que romper los muebles y quemar las casas y vivir las vidas a troche y mucha consiguiendo que las manos vuelvan a sonreír a todos los que sobrevuelan con los cuervos el amanecer

3 comentarios:

Ameise dijo...

Paso mucho tiempo desde que las katanas sobrevolaran tu piso y ya pensabamos en el cuarto reich que los ninjas habian acabado contigo pero por fortuna no es asi y ni los mas frios inviernos nos evitan la gracia de tus palabras invocando luciernagas en las mañanas gelidas mientras el sol se asoma a tu ventana recordando el nuevo dia que empieza al otro lado del muro.

katz dijo...

" Otoko salió a la galería y con un pie desnudo asestó un puntapié a la jaula de luciérnagas, que rodó hasta el jardín.

Todas las luciérnagas parecieron encenderse al mismo tiempo. La jaula derramó un resplandor verdoso sobre el musgo en que había caído. El cielo se estaba cubriendo luego del largo día estival, y una ligera bruma vespertina comezaba a flotar sobre el jardín, pero aún habia luz. Era muy raro que las luciérnagas brillaran con tanta intensidad. Quizá sólo habia imaginado aquel rsplandor verdoso que difuminaba la jaula, quizá lo habian conjurado sus propios sentimientos. Permaneció rígida, como paralizada, y clavó la mirada en la jaula tumbada sobre el musgo." kawabata. aufas!!!

Anónimo dijo...

visite mi bloggg en salyodada punto mierda
taizin