jueves, octubre 21, 2004

noche de un día que no recuerdo

no hay nadie que pueda perderse

lo que buscas siempre ha estado contigo

sentado, me siento tan pequeño que el mundo me abraza

la paz recorre mis pies y mis manos y no intentaré detenerla

viernes, octubre 08, 2004

haiku de la noche de octubre

aunque no intento
que las palabras vuelvan
mira, son tuyas

lunes, octubre 04, 2004

automático

en cuanto pueda decirte quién soy te diré lo contrario

tengo unas ganas terribles de comer a la luz de un sol que no pueda conmigo

contraigo la psicosis cuando veo que tus ojos son los míos

corregir a la velocidad de la luz es inútil

lo intento para no mostrar los imbéciles modos de perder el tiempo que inventé

en mi casa empiezan a formarse estalactitas llenas de semen y sangre de color azul

muchedumbres llenas de herraduras caminan con los ojos puestos en días de plástico

es mejor si dices a los demás que te gustaría desaparecer

empiezas a gritar como una puta en las noches frías en las que nadie llega detrás del dibujo de tus pasos


y aunque cometa faltas de ortografía al intentar describirte

y aunque no sepas quién eres

cuando me miras puedes quitarte la careta



mejor si pasamos página en estos días llenos de gafas de sol

la luna, su luz me impide dormir cuando llega por la ventana a darme un beso de nunca noches

y sin embargo el insomnio es un regalo, me da tiempo para pensar en mis cosas con el cerebro dibujando espirales alrededor de lo obvio de mi sangrante vergüenza

y a pesar del cansancio voy a seguir diciéndote lo que pienso

pienso que eres una puta y que no tengo suficiente dinero para comprarte

lloro y lloro y grito a pesar del dolor de cabeza absurdo que llena mi cerebro de llagas

estoy mejor que nunca

me llegan unos extraños pinchazos de la parte superior izquierda frontal de mi cráneo

pudiera ser una señal de que no hay manera de subir al coche para huir del coche

apesta a zen mi modo de hablar porque no digo nada

por eso soy como un animalito recién salido del cascarón de un huevo de dinosaurio

por eso soy un cerebro a medio hacer en un mundo deforme

por eso soy un elefante yendo al cementerio sin colmillos

por eso mi estómago rechina cuando llega la noche y no hay ningún plan y me voy al cine y la pantalla se queda muda y no me dice nada

por eso grito y grito

por eso mantengo la sonrisa aunque parezca que estoy gruñendo como un gato

por eso multiplico mis manos en el intento de repetir lo que ya dije

por eso espanto a las niñas con sonrisas de imbécil

por eso pido a dios una oportunidad para defender una causa perdida

por eso anuncio a los cuatro costados de cristo llenos de navajazos

por eso mis días se escurren por el desagüe

por eso vivo a media luz

por eso abro la ventana y la ventana se cierra

por eso busco en la red personas como yo y cuando las encuentro me parecen idiotas

por eso miro la radio esperando una señal del fin del mundo

por eso creo que deberías ser un poco más realista y dejarme morir

por eso a través de mis heridas la luz entra y descubre un vertedero

por eso navego sin manos en un escaparate lleno de cadáveres

por eso musito un nombre que nadie me puso

por eso atravieso el mundo como el viento que trae la locura

por eso busco sin sentido una frase que me deje callarme

por eso quisiera que me dijeras el color de mis ojos bajo párpados

domingo, octubre 03, 2004

haikus de la mesa del salón

cintas y libros
el teléfono móvil
púas de guitarra

botella de agua
monedas y facturas
radio sin pilas

voces de fuera
las llaves de casa
hojas en blanco

sábado, octubre 02, 2004

mediodía

estas paredes
guardan una ciudad
todo desorden

Viernes, noche de octubre

Salgo del cine y las calles están llenas de cosas en las que no me había fijado, escucho mis pasos y las paredes de las escaleras de mi casa permanecen en mis ojos hablándome.

Ahora miro las letras que aparecen en el blanco de la pantalla y escucho las canciones que llegan de la calle a través de la ventana y veo mis manos seguir un camino.

Ahora las sombras del ordenador y las sombras en mis recuerdos y el beso de las noches que nunca llega y el tiempo que me deja sin nada a que volver.

Ahora vacío y lágrimas que no alcanzan. Ahora parpadeos. Ahora un nuevo día. Ahora bajo párpados. Ahora la madera de la mesa que permanece muda. Ahora las grietas en mis sentimientos a través de las que me destruyes. Ahora la velocidad en que puedo desaparecer. Ahora renacer.